Con excitacion e interes se preguntaba Jose franco por los andares de mañana miercoles a manos de Inocencia Rocha y sus caminares por el sur de Londres y hasta ahora su rumbo conocido en locacion, esta vez en su trolly por carro ella cargara una maquina de retratar de esas corte antiguo cinco por cuatro marca Toyo, lente intercambiable apertura 64, cubierta en madera y color caoba, la acompaniaria un tripode testarudo de titanio que le daran la seguridad en ejecucion y disparo certero, cargara ademas en su carrito portable cerca de diez pares de porta negativos crudos marca Ilford en blanco y negro de doble compartimiento y desde luego su bolsa negra totalmente obscura para cambiar y colocar nuevos, para finalizar cargara tambien una luz con su filtro casi que de papel celofan amarillo como lampara de luz de barrio e ilumunar lo que mas pueda, si asi como las luces del cuarenta, como en el cine. Jose Franco se las maquinaba todas mientras libreta en mano ejecutaba en su idea por ciertos acercamientos de como ayudarle a Inocencia y por ende a la modelo, como hubicar las luces e irradiar parejo los animos del personaje en conversacion. Por que mañana miercoles Inocencia segurito que se levantara temprano, re-alistara su equipo y chequeara dos veces por su medidor de luz toditico y sus baterias, caminara parejo con rumbo en conversacion con Eve Diaz, la actriz Peruana de quien tanto ha oido mensionar, asi como te digo, Jose las presentara a si mismas en antesala a la sesion del miercoles, se sentaran y atravez de un te de coca que une los pueblos pero no causa alucinacion. Inocencia y tal vez por iniciativa Eve daran comienzo a su conversacion, se daran la mano en respeto, solemnidad y obra y desde luego la fotografo se sentira orgullosa por conocerla, ver su rostro bello cual indigena de Abancay, Pero no Eve venia de Cuzco y se sentia tan orgullosa de serlo, tenia cierto porte y etica que la diferenciaba del Peruano comun pues ahora en su exilio y por su trabajo actoral habia viajado por toda Europa y los paices nordicos cual fascinacion, habla tres idiomas desde el Portugues, un ingles de buenas maneras y su nativo español, cuan recatado y de tono fonetico que inspira respeto y autoridad, su cara recalca una cultura digna demarcada por las afirmantes arrugas en la edad en sus setenta y cinco años, cabello larguisimo negro partido en la mitad con algunas señitas minusculas de canas casi dificiles de palpar solo si acercabas tus ojos ahi, hasta casi sentir su respiracion.
Jose se imaginaria que esos diez primeros minutos en preparacion de parte de Inocencia iban a ser de reconocimiento del terreno y espacio que tendria para ingeniarse la forma de atrapar el encanto de Eve sin presionarla al enojo mientras le escudriniaba el alma, Inocencia tendra que ser cauta si le pregunta por su procedencia y su fatuas militancias en el sendero luminoso, por que Inocencia ha hecho su reseña y a recolectado datos del pasquin latino que se reproduce anonimo en clave y misterio como las cartas secretas que parecian venir en blanco, pero mas bien si fueras inteligente te percatabas que venian escritas a punta de pluma y tinta acida de limon, que desde pequeña intercambia la misma Eve entre camaradas maoistas, Eve tenia un pasado casi anonimo y se escondia en las tablas y escenarios Limeños en su epoca para arengar su audiencia con mensajes inmersos y codigos secretos dentro del libreto. La tarea de Inocencia Rocha de mañana miercoles consistira en retratar a Eve Diaz buscando encontrar el hilo conductor para mostrarla digna y de estirpe nomada por ciertos acechos, Eve la migrante y proletaria de cabello indigena lacio y largo, abrigo blanco de lana en crotchet posando con sus manos entrelazadas junto a su ventana y veneciana entre-cerrada para que pequeños rayos de luz se filtren por la tarde en fin de verano de cuatro de la tarde junto a la hiedra de hoja fresca que se extiende interna en su soporte y busca salida hacia esa misma ventana en contra ataque por respirar. Inocencia visitara el apartamento de Eve en ese segundo piso del bloque del concejo en la calle Aubey, con la cultura de un pueblo por decoracion y artesania, con tejidos por cuadros hechos a mano, con ceramica en barro y muñecas cosidas a mano con sombrero de jicara, bluzon blanco y pollera negra. A Jose Franco le llegaran las doce de la noche y se pondra contento de que mañana miercoles Inocencia y su maquina de retratar se den la mano para documentar la historia de una actriz de alma migrante y sin patria materna, que ahora dicta clases de español en la ‘city’ para poder vivir por que ser militante y buscar por un mundo nuevo sigue siendo una utopia.
©Ed BeronC, 2010
No hay comentarios:
Publicar un comentario